¿Quiénes son los mejores ingenieros e ingenieros técnicos industriales opositando?

Al comenzar a preparar una oposición es difícil saber si uno va a ser un buen opositor. En nuestra opinión un buen opositor es la combinación de tres elementos: capacidad, tiempo dedicado y motivación.

Cuando hablamos de capacidad no es necesariamente la que nos exige la carrera. Los ejercicios determinan qué habilidades se precisan: capacidad de entender las preguntas y respuestas del test y aplicar lo estudiado, capacidad de análisis en los supuestos y capacidad de redacción en los escritos. En general más cercanas a las «letras» que a las «ciencias».

El tiempo es evidente que influye, no solo en la cantidad sino en su distribución, por ejemplo intercalando repasos y equilibrando teoría y práctica de los ejercicios.

Por último la motivación, un opositor motivado, como en cualquier otra faceta de la vida, rendirá más y competirá mejor.

Nuestro consejo es medirnos desde el principio con test para asegurarnos que estamos avanzando suficientemente. Un abandono a tiempo es a veces lo mejor.

¿Qué pasa si no hay oferta de plazas aprobada?

Lamentablemente, en las Comunidades Autónomas no existe una pauta concreta de ofertas y convocatorias. No es raro encontrar años sin ofertas de una determinada titulación.

Por ejemplo en Andalucía, hemos tenido ofertas de Ingenieros Industriales en los últimos diez años en 2017 (5 plazas), 2018 (35 plazas), 2019 (5 plazas) y 2020 (9 plazas) y en Ingenieros Técnicos Industriales en 2016, 2018 (27 plazas), 2019 (3 plazas) y 2020 (5 plazas).Puedes consultar el resto de ofertas y convocatorias en las diferentes comunidades autónomas aquí

No existe por tanto forma de saber cuando y cuantas plazas. De ahí como hemos recomendado solo decidir prepararse para una oferta publicada. Nosotros solo preparamos para ofertas concretas y la preparación empieza con la oferta y termina con el examen.

¿Es aconsejable presentarse por segunda (o tercera) vez a unas oposiciones?

Una de las decisiones más complicadas es que hacer si no se consigue la plaza. El esfuerzo y tiempo dedicados puede inclinarnos a volver a intentarlo.

Sin embargo la realidad es que la tasa de éxito de los repetidores no es tan alta. Es cierto que algunos opositores llegan justos a la primera convocatoria y en la segunda con algo más de tiempo pueden ir más preparados, pero una oposición tiene mucho de parecido a la preparación de una competición y el día del examen hay que estar en perfecta forma.

El opositor que quiera tener éxito en un nuevo intento tiene que cambiar radicalmente, estudiar más, ir más fuerte, estar más convencido, aumentar la intensidad. Solo con un cambio así el siguiente intento puede ser exitoso.

Esto se agrava cuando la siguiente convocatoria es de menos plazas que en la que acabamos de suspender. Por ejemplo en la actual oferta AND19-20 en la que pasamos de una oferta muy grande con muchos opositores y plazas a una oferta con relativamente pocas plazas. Si no se se consiguió en AND17-18 nos tememos que con similar nivel de preparación será casi imposible tener éxito en AND19-20

¿Se puede opositar y trabajar a la vez?

Definitivamente sí. Es lo más habitual entre los ingenieros e ingenieros técnicos industriales.

En los muchos años que llevamos preparando, no hemos observado que opositar y trabajar a la vez sea una desventaja. Es cierto que podría pensarse que un opositor a tiempo completo tendrá más tiempo. Eso es cierto, pero también es cierto que los opositores que trabajan tienen conocimientos en general de parte del temario y una visión más práctica de los temas que los recién titulados. Otra cuestión es el opositor que por algún motivo no esté trabajando pero lo haya hecho en los últimos años.

Lo que sí es determinante es la capacidad de estudio. Todos sabemos que cada persona necesitar diferente tiempo para un mismo temario. Por otra parte en las oposiciones hay una fase de adaptación, no solo por volver a estudiar quizás después de varios años sino porque es un estudio diferente al que solemos hacer en nuestra carrera.

Un opositor que trabaje a la vez tiene que sacar 2-3 horas entre semana y 20-30 horas el fin de semana como norma general, lo que es un sacrificio importante. El entorno (familia, amigos) debe apoyarnos en esta empresa. Pero se puede, de hecho la mayoría de nuestros opositores que han sacado plaza estaban trabajando (de ahí que cuando era presencial las clases eran los fines de semana).

Nuestro consejo es no dejar de trabajar, salvo que ya muy avanzado pensemos que esas horas puedan ser decisivas (por ejemplo aprobar el primer examen y dedicarse a tope al tercero). En ocasiones además las convocatorias y los exámenes se retrasan y nos dan tiempo adicional.

Hay que pensar que la tasa de abandono en la preparación es muy elevada en los primeros bloques, muchas veces el opositor o no le gusta la oposición o ve que no avanza. De hecho nosotros recomendamos usar el simulacro de fin de bloque como medida de si tiene sentido seguir con el siguiente bloque o no.

En conclusión, si estás trabajando, lo primero es valorar el número de plazas y nuestras fortalezas. Si nos decidimos, apretar a tope con el primer bloque y ver como va. Si vamos bien, seguir así, salvo en su caso muy al final ya con la oposición convocada, y valorar entonces si merece la pena arriesgarnos a dejar el trabajo. Pero de primeras, no lo vemos necesario.

Nuestra preparación para el primer examen en el caso de opositores que están trabajando sabemos que se puede seguir dado el gran número de opositores que ya lo han hecho con éxito en los 12-14 meses que dura el curso, y es entonces el momento de tomar otras decisiones.